No cabe duda que las películas más aterradoras son aquellas donde los niños son quienes personifican la maldad, puesto que nadie puede concebir que un niño pueda llegar a atentar contra un adulto. Por supuesto que muchos casos se han dado como El Petiso Orejudo o Jesse Pomeroy, pero aún hoy día resulta descabellado imaginar siguiera que un niño pueda tener una mente tan maquiavélica.
Así como sucede con los payasos, los niños son sinónimo de inocencia y ternura, pero que ocurre cuando un niño lleva la maldad en su sangre y comienza a manifestarse. ¿Quién lo puede detener?
Muchas películas se han basado en estos niños con mentes diabólicas quienes valiéndose de su pequeña estatura no dudan un segundo en eliminar a quien no cumpla las reglas de un mundo que ellos mismos han creado, en el cual, los adultos no tenemos cabida a menos para ser sus víctimas.
Cuando el cine comenzó era un tabú hacer cine de horror en donde se involucraban niños, pero quizás a raíz de los casos relacionados con niños psicópatas, estas criaturas de pequeña estatura para el mundo del celuloide ya no resultaban tan inofensivos y aunque con cierto recelo se fueron produciendo algunas películas donde los niños intervenían de forma indirecta y luego su participación fue más notoria como el claro caso de The Omen (1976).
Alfred Hitchcock era sincero cuando afirmaba que nunca recomendaría un rodaje con animales y con niños, sin embargo no pudo evitar dejar su sello personal en una de las películas que mejor parado lo dejo en la década de los 60´s, Los Pájaros. Niños corriendo, aterrorizados por unos violentos pájaros que habían azotado la zona.
Pero también podremos recordar aquellas donde los niños no son tan inocentes como aparentan, haciendo de victimarios en lugar de hacer de victimas. Muchos filmes se han centrado en los niños y la maldad, y una muestra es La Huérfana de Jaume Collet-Serra (La Casa de Cera en el 2005), que en esta oportunidad se centra en esta película basada en dos filmes La Semilla del Mal dirigida por Mervyn Le Roy, protagonizada por Patty McCormack en 1956, y El Buen Hijo dirigida por Joseph Ruben y protagonizada por Macaulay Culkin (Mi Pobre Angelito I y II) en 1993.
El personaje de Esther es interpretado por la actriz estadounidense Isabelle Fuhrman, dicho personaje ha sido considerado el más real desde el personaje interpretado por Kathy Bates en el film Misery en 1990.
Los expertos cinematógrafos aseguran que hay dos tipos de terror infantil, donde el niño tiene cierto vinculo con Satán como fue el caso de Omen en 1976 y posteriormente en el 2006, y otro tipo es cuando la maldad es una cuestión nata en el niño.
Los niños que han trabajado en este tipo de filmes no han corrido con buena suerte. Algunos, como el caso de Linda Blair (El Exorcista) y probablemente Harvey Stephens (Omen, 1976), han quedado perturbados, y otros menos afortunados mueren como el caso ya mencionado anteriormente, Heather O´Rourke (La saga de Poltergeist).
También podríamos mencionar la maldad colectiva como seria el caso de El Pueblo de los Malditos en 1960 y posteriormente en 1995, esta ultima dirigida por John Carpenter, Los Niños del Maíz en 1984 dirigida por Fritz Kiersch, The Children dirigida por Tom Shankland en el 2008, y ¿Quién puede matar a un niño?, de Chicho Ibáñez Serrador en 1976, donde los niños tiene sus propias reglas y que son aplicadas implacablemente contra los adultos.
Estos casos existen en algunas comunidades de Bosnia y Tailandia donde los niños se ensañan contra los adultos con tal de proteger lo que ellos consideran su pequeño mundo.
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