Una de las avenidas mas concurridas de Roma, no muy lejos del
Vaticado es la Via dei Gracchi, una calle comercial donde hay un sin numero de
cafes con terracitas y tiendas de todo tipo, desde lo que esta mas a la moda
hasta para aquellos mas exigentes. En el local número 260, se encuentra un
local que cuenta con 20 metros cuadrados de superficie y cuenta con un acceso a
un museo que es mas bien una atracción de feria donde se puede disfrutar de su
decoracion netamente pesadillezca, que destaca por su marco de
madera pintado de rojo y una vitrina llena de muñercos terrorificos, camisetas,
y souveniers de horror, se llama "Profondo Rosso"...si, como la
pelicula del director italiano Dario Argento, y es precisamente de este
polemico director a quien pertenece este museo del horror. Este recinto de lo
macabro y terrorifico fue fundado por Argento y el director Luigi Cozzi en
1989.
Al día de hoy es de uno de los museos mas llamativos y curiosos de toda Roma. Este excéntrico museo se ha convertido con los años en un punto de encuentro entre los amantes del giallo y el cine de horror italiano. Además de exhibir productos realmente grotescos, aquellos coleccionistas pueden adquirir productos relacionados con el trabajo de Argento.
Para los amantes del cine giallo y de horror este museo
es un verdadero santuario donde se pueden adquirir desde las mas famosas
peliculas de Argento hasta los productos mas inusuales que un coleccionista del
horror puede adquirir, además de poder experimentar estar en escenarios de
peliculas como como Inferno ( 1980 ) o Rojo Oscuro ( 1975 ), centrada ésta
última en una serie de sucesos parapsicológicos con un final bastante trágico,
adempas de encontrar autopsias de aliens, una mujer atada a una piedra
esperando ser sacrificada, el fantasma de la opera amenizado con el hilo
musical del lamento de los "condenados". Se trata de toda una
sinfonía de terror digna de cualquier film de el afamado director italiano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.