Jane Andrews, antigua ayudante y amiga personal de Sara Ferguson, Duquesa de York, para quien trabajo durante nueve años, protagonizo uno de los crímenes pasionales que más polémica causo en el Gran Bretaña. Después de dos años de romance con el multimillonario Thomas Cressman, este se negaba a casarse con ella, quizás por una relación que mantenía con una mujer norteamericana que había conocido por internet. En uno de esos mensajes, Thomas le decía a su nueva conquista, refiriéndose a Jane: “Es como un par de zapatillas de las que uno no puede librarse”. Este hecho llenó de furia a la engañada Jane.
Luego de una carta en donde Cressman dejaba claro el final de la relación, y ciega por los celos y con una sed de venganza, Jane decidió que era necesario hacer pagar con su propia vida al hombre que amaba, por lo que con un bate de cricket lo golpeo en la cabeza mientras este dormía, y posteriormente lo apuñaló con un cuchillo de cocina de veinte centímetros. Tras cometer el macabro crimen, Jane huyó y permaneció desaparecida dos días, hasta que fue encontrada por las autoridades en el interior de su automóvil. Sara Ferguson durante las 48 horas en la que su antigua ayudante estuvo desaparecida, por medio de los medios de comunicación le pidió a Andrews que se entregara a las autoridades.
Durante el juicio tanto el bate como el cuchillo fueron usados como evidencia, convenciendo al jurado de la culpabilidad de Jane, luego de deliberar durante once horas y cuarenta y cuatro minutos. Jane, vestida de negro y sujetando entre sus manos un pañuelo, se mantuvo sentada y en silencio mientras que el juez recordaba los hechos y mientras que esperaba la decisión del jurado. Andrews fue sentenciada y condenada a prisión perpetua. Luego de aquella decisión, tanto David como June Andrews, los padres de Jane rompieron a llorar. Luego del fallo del jurado, la Duquesa de York no hizo ningún comentario al respecto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.