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jueves, 28 de enero de 2016

Reflexión: La finca de Jacob

Jacob recibe la visita del abogado de su padre, el Licenciado Gómez, quien por años se había ocupado de los asuntos del padre de Jacob hasta el día de su muerte. Jacob había heredado una finca de pocas hectáreas pero el problema es que esa finca estaba invadida así es que había que buscar la forma de que los invasores salieran del lugar. 

Se trataba de una familia campesina que no tenían donde vivir.  Por tanto, el juez que estaba llevando el caso decidió que Jacob debería de darles una pequeña parcela para que ellos pudieran construir su casa y que el Estado les ayudaría con un subsidio mensual. 

Jacob accedió no sólo a darles la parcela sino ayudarlos con víveres y medicina, ya que era gente muy pobre. Pero los campesinos no estaban conformes con la parcela sino que querían quedarse con la finca. Jacob  pronto se mudó con su esposa y sus doce hijos y fue ahí donde comenzaron a surgir los problemas. 

Jacob tenía ganado que fue comprando pero los campesinos llenos de furia los iban matando, así comenzaron, matando el ganado de la finca de Jacob, ganado del cual Jacob sacaba para darles leche y queso, mejor dicho, cuan ignorantes serían estos campesinos que estaban matando su propia fuente de alimentos. 

Jacob también tenía gallinas y los campesinos también les iban matando las gallinas de donde Jacob sacaba para darles huevos. Y así cada animal que Jacob compraba para no sólo alimentar a los suyos sino a los campesinos, ellos mismos los mataban. 

El odio de los campesinos era tal que se metían en la finca de Jacob a causar daños. Un día Jacob cansado de los campesinos acudió al juez que había tomado aquella resolución, pero el juez se negó a ayudarlo argumentando que Jacob debía respetar el acuerdo que había hecho previamente de acceder que la familia de campesinos se quedarán en la pequeña parcela. 

De regreso a su finca, triste y desesperado, Jacob se encuentra con la terrible noticia de la muerte de uno de sus trabajadores quien había sido asesinado por los campesinos. Los terratenientes de la region que ignoraban lo que ocurría defendían a la familia de campesinos porque ellos decían que Jacob les había quitado la casa donde ellos vivían. 

Los terratenientes tenían en un pésimo concepto a Jacob a causa de las mentiras de la familia de campesinos. El dueño de la tienda de abarrotes ya no quería comprar la leche y el queso que Jacob le vendía y el dueño de la botica ya no quería venderle a Jacob medicina ni artículos de primeros auxilios, así es que la esposa de Jacob comenzó a hacer medicina con las plantas de la finca. La situación para Jacob y su familia comenzó a ponerse delicada ya que no contaban con la ayuda de nadie. 

Los campesinos querían que Jacob se aburriera y abandonara la finca para ellos poder volver a invadirla, por lo que seguían matando animales, asesinando a los trabajadores de la finca y causando daños sin que hubiera autoridad que los frenará. 

Reflexión: El odio embrutece y más aún,  cuando se trata de un odio gratuito e injustificado. 







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