La Logica de la Avestruz

Estamos a merced de los enemigos de la libertad gracias a la ceguera que invade a Occidente, esa ceguera que nos obliga a meter la cabeza en la tierra y justificar lo que ante los ojos de las democracias no es justificable. La avestruz esconde su cabeza cuando no quiere verse involucrado en asuntos con los cuales no comulga pero por cobardia se esconde tras una fachada de indiferencia por no ser señalada. Asi se porta Occidente, cuando se trata de hablar del mundo musulman. Occidente es la gran avestruz del siglo XXI. que por intereses economicos y quizas politicos que nada tienen que ver con la justicia, esconde la cabeza tras eufemismos que crean ideas erroneas entre la población civil. 

Occidente sale con sutilezas inutiles como aquello de "no insultar las religiones", aquella (religión) que insulta las libertades, la paz, que dejan muerte por donde pasan. Que mas insulto que querer imponer en Europa sus ideas, asesinando por unas criticas, mismas que en Occidente se combaten por la via del dialogo. Con ellos se perdio la civilización y gano protagonismo el retraso y el odio. Occidente se dejo seducir por ideas superadas cuando se hablo de los derechos humanos y de la democracia tal como la conocemos. Occidente se dejo seducir por la informacion adulterada y tergiversada y por la patetica pantomima de los pobres martires que el islam presenta para ganar adeptos y hacernos esclavos de su odio. 

Occidente, Somos la gran avestruz que esconde su cabeza por miedo, y dejamos entrar a nuestra sociedad al enemigo de la diversidad cultural, de credo, de genero, de pensamiento, poniendo en peligro a las proximas generaciones, aquellas que aun no nacen y que merecen algo mejor de lo que tenemos. 

Atacar al islam no es atacar a las personas, es combatir las doctrinas diabolicas que quieren imponernos por la fuerza, a traves de videos donde degüellan personas sembrando el miedo como para que prefiramos no hablar. Pero no hablar es igual que permitirles invadir nuestras vidas y poner en peligro nuestra libertad.