Quise tomarme este espacio para hablar de un milagro. Los milagros ocurren todos los días, basta con despertar cada mañana y poder disfrutar de ver, cuanta gente hay que no amanece o despierta es para ver todo en la mas completa oscuridad porque han quedado ciegos. Es un milagro tener alimento en nuestra mesa cuando en este mundo hay muchos que se mueren de hambre.
Este milagro que les voy a relatar tiene que ver con tener, perder y ver que en un momento en el que creiamos que nuestro padre amado nos había olvidado el nos bendice con algo. Rabbi Shmuel Elimelech Braun y su esposa Channy
trataron por años de tener un bebe, pero tal parecía que a la joven pareja se les había negado el derecho de ser padres.
Cuando sus oraciones fueron contestadas, llevaron a la pequeña bene de tres meses de nacida al Muro Occidental (o Muro de Los Lamentos) a dar gracias a Dios y trágicamente un terrorista palestino acabó con la vida de la pequeña aquella tarde arroyando con un carro a un grupo de personas que estaban en una estación del tren.
Shmuel y Channy pidieron al Eterno un consuelo para su dolor y 10 meses despues Channy dio a luz una hermosa bebe. Los milagros siempre ocurren, pero el ser humano en su terquedad es incapaz de ver lo que Dios le pone dia con dia en su camino.
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